El pasajero de Barcelona

Hace poco escuché una conversación que empezaba con: "¿conoces 'La Odisea'?". Pues aquí va mi pequeña ídem:

Mi avión salía a las 19:25 del lunes, 13 de abril. Cierto es que apuré (mas de lo normal en mí) la llegada al aeropuerto, pero era por la mejor de las razones. Finalmente me encontraba en la cola de los mostradores de facturación aproximadamente a las 18:00. Lo reseñable de esa cola es que, por h o por b, dieron preferencia a las familias y nos quedamos 2 pasajeros en tierra. Al otro lo reubicaron en un vuelo de otra compañía y para mí no quedó otra que posponerme el vuelo para el día siguiente... empezaban a llamarme "el pasajero de Barcelona", primero la atenta chica del mostrador, más tarde la supervisora de la compañía y luego el encargado de la oficina de ventas.

Cash en concepto de indemnización, hotel y taxi pagados eran los agradecimientos y disculpas de la compañía. He de reconocer que todo esto fue regado con buenas conversaciones y un trato inmejorable por parte de todos los trabajadores de la aerolínea.
Ya al día siguiente, 14 de abril, me tocaba estar en la oficina de ventas a las 6:00 a.m. De nuevo, por vigésima vez en 12 horas, escuchaba lo de "el pasajero de Barcelona" en una conversación telefónica entre la oficina de ventas y vetetuasaberquién. Pues esa vetetuasaberquién pasó a recogerme, nos colamos 'por la cara' en el mostrador de facturación con un billete de primera clase y al poco rato me encontraba ya degustando el menú de desayuno del avión.

Deprisa y corriendo cogí un taxi para dirigirme a la oficina. Me estaban esperando para darme la "bienvenida" al duro trabajo diario.

Y yo... feliz de la vida!!