miércoles, 16 de septiembre de 2009

Mis Cigüeños (I): Mori


Tiene cohones (anda, mira! como el finlandés de ayer) que tu padre fuese el primero en verme. Parece como si nada más sacarme de mi madre, dijera: "Ala! éste como colega de mi niño"
Y ahora me sonrío cuando recuerdo nuestra Avenida del Valle, nuestro Parque de la Rana, esa foto vestidos de principitos o, yéndonos más adelante, el día que llegué a Cáceres y nos daba palo a los dos echarnos un cigarro o pedirnos una Shandy delante del otro.

Eres el único, repito, el único al que confío todos mis secretos. Y eres un capullo si no lo crees así. Por supuesto, me encanta que precisamente tú seas mi confesor, porque sé que aunque te diga que quiero robar un banco, tu estarás a mi lado.

Me echas la bronca por morderme las uñas, por estar enamorado de quien no debía (o debo), por irme antes a casa un sábado por la noche, ... te alegras como el que más cuando algo me sale bien, me llamas por teléfono los viernes 'porque sí' y me abrazas cuando sabes que lo necesito.

Por los buenos y malos momentos que hemos pasado y seguiremos pasando como amigos, por las complicidades, confianzas y juergas, hoy levanto mi copa de vino (mentira, es una cerveza) y brindo por ti, para que la vida te sonría... y porque yo lo vea.

Te quiero un huevo!

4 comentarios:

Mori dijo...

se me cen los lagrimones!!!!!!!

Gracias por ser!!!!, (y punto)

Un abrazo enorme amigo.

Leone Mejillone dijo...

Eh eh..., que corra el aire...XD


¡Soy leone! ¿Qué tal os va todos?

Besitos

Nando Calleja dijo...

Mori, yo no te mando un abrazo. Me lo guardo para dártelo en persona.

Leone Mejillone!, bienvenido a esta, mi casa y la de todos.

Anónimo dijo...

Da gusto haber criado a gente como vosotros.
Padre.