viernes, 27 de marzo de 2009

Te odio desde la distancia


Confundido, extraño, como un tronco sin raíces.
Las comisuras son hojas caducas que ya han caído.
Vuelven los brillos pupiláceos como rocío temprano.
Dios y el demonio enfrentados en el envés de las manos:
uno en la copa y el otro en el cigarro.
Viento del norte, resaca del sur: sensaciones enfrentadas.

Mi niña por fin duerme.
Tranqui pequeña, que yo velaré la puerta a tus sueños.
Prohibiré la entrada a quienquiera desvelarte.
Abraza fuerte el corazón que ya arrancaste de mi pecho.

Llámame para decirme que hoy sonríes.
Yo maldeciré cada una de las lágrimas que he derramado por ti.
Quedarán recogidas en el mismo cajón que ya guardo mi amor encubierto.

Odio que seas feliz...
sin mi.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Nando.... sin palabras....., QUE BONITO. Me encanta, tienes talento naural.Te mando muuuchos besos. Por cierto, me dijiste que venías para acá por Semana Santa no??? besos y a ver si nos vemos pronto

Nando Calleja dijo...

Me alegra que te guste Laurita!!
Y si a acá te refieres a tierras andaluzas, sí, voy a currar allí y ya me quedo en Semana Santa.
Asi que nos vemos, eh?
Mil besotes también para ti.