jueves, 26 de febrero de 2009

De la química (o relativo a ella)


Eres un vicio irreconocible que se pierde en una mirada estúpida. Quisiera ponerme tus ojos para ver mi ignorancia, la misma inopia que me incita a quererte. Usar esos ojos para mirarme al espejo y descubrir que Stendhal tenía razón al admirar tanta belleza. Tengo mono del capullo de Bach para frenar al corazón, sin siquiera haberlo probado. Quiero arrancarme los ojos e inyectarme CaMKII hasta llegar a olvidarte.
Quiero drogarte a ti para que tú olvides. Chutarte Propanolol. Quiero ponerte mis ojos vueltos hacia dentro para hacerte sentirte. Beber contigo un cóctel hecho con dopamina, serotonina, testosterona y oxitocina... y darle el nombre de "tuyyo" a la reacción química de 'sentir con la piel'.

Qué feliz es la suerte de la vestal libre de culpa
Olvidarse del mundo, por el mundo olvidada.
¡Eterno resplandor de la mente inmaculada!
Cada rezo aceptado, y cada antojo vencido


(PS: Creo que ha sido de las entradas más curradas y más divertidas de hacer de las que llevo)

5 comentarios:

Alberto dijo...

Ante tal despliegue de hormonas lingüísticas no me queda otra que felicitarte por la entrada. Enhorabuena a tus neurotransmisores, original y bien hecha di que sí

Nando Calleja dijo...

Ay! si sólo fuesen lingüísticas ;)
Tengo miedo de que llegue la primavera

LAURA dijo...

Curradita curradita.. si señor! me ha encatao! enhorabuena! y ten cuidao que la primavera esta al llegar...

Anónimo dijo...

Ay, ay, ay hermano mío....es que hay algo que no me hayas contado?? eso de la primavera me mosquea.
Prepárate para un interrogatorio de tercer grado este finde en Madrid!!

Nando Calleja dijo...

Tranqui, sister, que no hay novedades en el frente.
Parece que la naturaleza no estan sabia como pensaba... ;)